BIBLIOTHECA AUGUSTANA

 

Don Juan Manuel

1282 - 1349

 

Libro de los estados

 

El segundo libro

 

___________________________________________________

 

 

 

[Capítulo XXXVI]

 

El xxxvi° capítulo fabla en cómmo el infante dixo a Julio que avía fablado tan generalmente en algunas cosas que él que lo non podíe entender.

 

«Julio,» dixo el infante, «vos avedes di{116a}cho muy bien. Pero en estas rrazones avedes fablado tan generalmente [    ], et aun porque <a> esto que avedes dicho non puedo entender quál es en sí el estado del papa nin en quáles cosas puede meresçer nin [en] quáles desmeresçer. Et por ende vos ruego que me fabledes bien conplidamente en estas çinco cosas: la primera, en el estado del papa; la segunda, cómmo se deve criar; la terçera, qué poder a; la quarta, en qué puede meresçer; la quinta, en qué puede desmeresçer.»

«Sennor infante,» dixo Julio, «para vos dezir yo estas cosas que me preguntades, avía mester de fazer otro libro bien tamanno commo éste. Et sinon porque sería muy luenga cosa, aun tengo que se puede escusar mucho dello. Por ende, non vos lo diré todo, mas dezirvos he lo que entendiere que cunple.

A la primera que preguntades: ¿Qué estado es el del papa? vos respondo que es el mayor et más alto que en todo el mundo puede seer. Ca el papa, porque es en este estado segund la ley de los christianos – que es verdadera ley – a poder conplido en lo spiritual, commo aquel que es vicario verdaderamente de Jhesu Christo; et alo muy grande en lo tenporal. Et así es el mayor et más alto estado que puede seer.

A la segunda que me preguntades: ¿Cómmo deve seer criado? vos respondo que lo deven criar los cardenales en esta manera: luego que el papa fina dévense ayuntar los cardenales en el logar do el papa fina et deven fazer su elecçión. Et do es la mayor parte, allí vale la eslecçion. Et desque es esleído por la mayor parte, luego de fecho es confirmado. Et desque es confirmado non se puede ninguno oponer contra él por ninguna cosa, sinon si fuese ereje manifiestamente. Pero si los cardenales non se aviniesen a la eslecçion por ninguna de las maneras que se fazen las eslecçiones, entonçe los de la villa do el papa fina devemos ençerrar en una {116b} posada et darles lo que ovieren mester fasta xxx días. Et si fasta aquellos xxx días non se fiziere la esleiçión por alguna de las tres maneras que se deve fazer – de las quáles la una es llamada de Spíritu Sancto; la otra, de conpromisso; la otra, de escrivano – dende adelante los de la villa devemos apremiar más a grados, fasta que pueda llegar la premia que non les darán otra cosa de comer sinon pan et agua. Et aunque les puede[n] dest[r]echar la casa en que estudieren ayuntados para fazer la eslecçion, todas estas premias, et más, les farán, quantas pudieren, fasta que ayan la eslecçion fecha. Et desque por qualquier destas maneras ayan la mayor parte de los cardenales fecha la eslecçion, luego de fecho es confirmado. Et después por cosa del mundo non pueden contradezirse nin oponerse ninguno contra él, salvo si fuese ereje manifiestamente. Et luego que es criado abre un libro que tienen de los nonbres que deven aver los papas. Et está en cada foja un nonbre que fallan escripto, [et] aquel nonbre a despues, et non le llaman por el su nonbre del baptismo que ante avía.

Et commo quier que ya fue de fecho que algún papa renunció

al papadgo tienen algunos que [non] se puede fazer, ca pues él es el mayor – et non a otro mayor – que así non deve aver poder de renunçiar el su poder. Et si el collegio de los cardenales pueden reçebir la su renunçiaçión, bien podríam así emendar alguna cosa que non fuese tan bien fecha, si la fiziesen. Et pues esto, que es menos, non se puede fazer, paresce que menos pueden recebir la su renunçiaçión.

Et, sennor infante, commo quier que por ventura algunas cosas ay más destas que vos yo he dicho, dígovos que segund yo cuido en esta manera se de{116c}ve criar el papa.

A la terçera pregunta que fazedes: ¿Qué poder a el papa? çiertamente, sennor infante, esto me es muy grave de lo fazer. Ca, por ventura, o avría a dezir algo de que me podría venir algún reprehendimiento et aun danno, o avría a dezir contra lo que algunos tienen por verdat et por razón. Et por esto, et porque non quería dezir cosa en que muchos pudiesen travar, non vos quiero dezir sinon lo que es çierto et en que ninguno non pueda contradezir. Et por ende vos digo que el papa a poder conplido en todo lo spiritual, así commo Nuestro Sennor Jhesu Christo lo dio a sant Pedro, que dexó por su vicario. Et son todos los christianos tenidos a tener et guardar todos sus mandamientos spirituales.

Otrosí a muy grant poder en lo tenporal. Mas quál o quánto es este poder, porque yo so de Castiella – et los rreys de Castiella et sus reinos [son] más sin ninguna subgectión que otra tierra del mundo – por ende non sé yo mucho desto. Mas los que son del Imperio, o a los que esto tanne, ellos se lo vean; ca nos non avernos que adobar en esto, nin nos queremos meter en lo que non avernos que librar.

A la quarta pregunta que fazedes, que vos diga en qué puede meresçer el papa, sennor infante, tan grant es la vondat de Dios et tanto fizo por salvar los omnes que quiso que la su passion et los meresçimientos de sancta María et de los sanctos, todo fue en remisión de los pecadores. Et aun, por (que) les fazer más merçet, quiso, et es razón, que en todas las cosas que omne faga estando en verdadera penitençia, que en todas a[ya] meresçimiento [    ] en las buenas obras que él faze, ante a parte en todas las buenas obras que se fazen por toda la Eglesia. Et esto es commo ya desuso es dicho, que Dios sienpre faría merçet conplida al omne si él non lo enbargase por su pecado. Et así el que está en ver{116d}dadera penitençia, pues non a enbargo por el pecado, en todo quánto bien faze, en todo a meresçimiento; et aun en todo el bien que se faze en Sancta Eglesia, tanbién en las obras de misericordia commo en los sesos corporales commo en los mandamientos de la ley, commo avrán en los buenos talantes.

Et, sennor infante, bien sabedes vós que el bien et el mal que son contrarios, pues si por el bien deve aver omne bien, otrosí por el mal deve aver mal. Et así pues, quando el omne piensa en fazer alguna buena obra et non finca por él de la acabar, et faze por ello todo su poder verdaderamente et non finca de lo acabar sinon porque non puede, este buen talante tanto gelo gradesçe [Dios] commo si lo oviese fecho. Et si piensa de fazer algún fecho malo et non finca de lo acabar sinon porque non puede, non gelo acalonna Dios tanto commo si lo oviese fecho. Et esto paresçe contra razón, ca pues Dios galardona tanto el talante de fazer bien que non finca sinon por non lo poder conplir commo si lo oviese fecho, pues el bien et el mal son semejantes maguer son contrarios ¿por qué non acalonna el talante de fazer mal et que non finca sinon por non lo poder fazer, tanto commo si lo oviese fecho? Et çiertamente así paresçe que devía seer. Mas la razón por [que] esto se faze es porque Dios es toda vondat, et por ende se paga del bien et aborreçe todo el mal. Et por la vondat conplida que a en sí, el talante del bienfazer tómalo por fecho. Et porque es vondat galardonar el bienfecho más largamente de quánto es et acalonnar el yerro menos de quánto es, por ende Dios, que es toda vondat, galardona el buen talante que se non pudo conplir tanto commo si fuese conplido; et non acalona el mal talante que se non pudo conplir, tanto commo si fuese conplido. Et así en todas las buenas obras de fecho et de talante meresçen los christianos que están en verda{117a}dera penitençia.

Pues si qualquier christiano que está en verdadera penitençia meresçe en tantas maneras, bien devedes entender si el papa – que es cabeça [et] mayoral de los christianos – puede meresçer et meresçe en muchas cosas. Demás que es el sacerdote mayor et a poder de consagrar el cuerpo de Jhesu Christo, que es el más alto sacramento que puede ser. Pues este sancto sacramento a de fazer cada día, o muy a menudo, bien devemos tener que sienpre deve estar en verdadera penitençia; ca qualquier sacerdote que este sancto sacramento a de fazer, et lo faze non estando en verdadera penitençia, valerle ía más non ser nasçido ca caye en aquella misma pena que cayó Judas Escarióte trayendo el cuerpo de Jhesu Christo. Pues el papa, que sienpre deve estar – et devemos tener que está – en verdadera penitençia, en quantos vienes faze et piensa et [en quantos] se faze[n] por todo el mundo, en todos puede aver meresçimiento, et lo a.

A la quinta pregunta (pregunta) que me fazedes, que vos responda en qué puede desmeresçer el papa, bien vos digo, sennor infante, que tengo que esto sería muy grave de lo poder dezir. Ca bien así commo desuso vos dixe que el papa podría meresçer en muchas maneras, bien así vos digo que puede desmeresçer en muchas si non obrare commo deve. Et ya desuso vos dixe que todo omne, en qualquier estado que fuese, podía, si quisiese, fazer tales obras por que salvase el alma o la perdiese, [si] quisiese. Et eso mismo vos digo que puede fazer el papa.

Mas pues vos dixe en quáles cosas podría meresçer, et queredes que vos diga en quáles puede desmeresçer, dígovos que commo quier que otras cosas muchas a en que el papa puede desmeresçer si non obrare commo deve, que, segund tengo, que puede desmeresçer si non partiere et obrare commo deve los çinco tesoros que él tiene [en] el su poder: el uno es el tesoro spiritual de Sancta Eglesia triunfante, et el segundo es el tesoro tenporal de las rrendas et de los averes ten{117b}porales de Sancta Eglesia militante, et el terçero tesoro es de la justiçia que es en su poder para la fazer, et el quarto tesoro es de los benefiçios et dignidades de Sancta Eglesia que a de partir, et el quinto tesoro es el juizio de su consciençia.»